América pintoresca; descripcion de viajes al nuevo continente por los mas modernos exploradores . alto Caqueta. Remontando este rio se encuentran dos grandes cabanas de indioscoreguajes establecidos á dos dias de la desembocadura. A una semana de navegación seencuentran algunas gentes civilizadas que explotan los árboles de quina. A la una y media pasamos por delante de una isla llamada Cuay, nombre que sirve paradesignar la palmera miritis en la lengua de los carijonas y en la de los rucuyos. A las dos nos EXPLORACIÃN DEL IZA Y DEL YAPURA 257 detenemos un rato junto á las islas Cosacunti
América pintoresca; descripcion de viajes al nuevo continente por los mas modernos exploradores . alto Caqueta. Remontando este rio se encuentran dos grandes cabanas de indioscoreguajes establecidos á dos dias de la desembocadura. A una semana de navegación seencuentran algunas gentes civilizadas que explotan los árboles de quina. A la una y media pasamos por delante de una isla llamada Cuay, nombre que sirve paradesignar la palmera miritis en la lengua de los carijonas y en la de los rucuyos. A las dos nos EXPLORACIÃN DEL IZA Y DEL YAPURA 257 detenemos un rato junto á las islas Cosacunti, donde se ve una choza abandonada por lasindios carijonas: examinando esta vivienda encuentro un banquillo excavado enteramenteigual á los escabeles de los rucuyos. Veo también unas figuras toscas que tienen la pretensicnde imitar un ave de rapiña, una especie de urubú, llamado atura. Esta especie de Ã-dolo noes la única; registrando todos los rincones, encuentro un pedazo de madera esponjosa talladaen forma de un hombre abierto de piernas, parecido á los dibujos del Yary que tomé por. El Salto Cuemany ranas. DÃ-cenme que estas rudimentarias imágenes tienen por objeto alejar los malos espÃ-ritus,que son los únicos temidos por los indÃ-genas del Yapura y de las Guayanas. El 3 llegamos á la desembocadura del afluente Santa MarÃ-a, en cuyo interior hay uacaserÃ-o de indios coreguajes. Santa Cruz, que conoce perfectamente á los indios por cuantosu madre era de esta raza, me dice que producirá gran efecto adelantándose á anunciar lallegada del gi-an Jefe de quien es lugarteniente. Al llegar al pié de una colina veo veinteindios, hombres y mujeres, que nos aguardan en el desembarcadero. Es el momento de haceruna demostración, y Apatú hace una salva de cuatro tiros. Por la noche presenciamos una de esas danzas que siempre veo con el mayor interés,procurando encontrar alguna relación entre las costumbres de esto
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