América pintoresca; descripcion de viajes al nuevo continente por los mas modernos exploradores . esar la cadena de montañas que nos separaba del valledel Usumacinta superior. El paso es penosísimo y casi impracticable para muías un levantamiento calizo de la misma formación que el horizonte yucateca, en el que laroca rota asoma á la superficie en placas cortantes y puntiagudas, siendo las cuestas en 44° AMÉRICA PINTORESCA muchos puntos de peligrosa rigidez. El arriero en jefe me propone descargar á las muías deun repuesto de víveres que nos servirá al regreso y del cual no tendrem


América pintoresca; descripcion de viajes al nuevo continente por los mas modernos exploradores . esar la cadena de montañas que nos separaba del valledel Usumacinta superior. El paso es penosísimo y casi impracticable para muías un levantamiento calizo de la misma formación que el horizonte yucateca, en el que laroca rota asoma á la superficie en placas cortantes y puntiagudas, siendo las cuestas en 44° AMÉRICA PINTORESCA muchos puntos de peligrosa rigidez. El arriero en jefe me propone descargar á las muías deun repuesto de víveres que nos servirá al regreso y del cual no tendremos ninguna necesidadpara el viaje de ida, aparte de que los víveres no escasean, pues el dia anterior habia matadoyo tres grandes monos, que nos comimos, por más que su carne fuese correosa y nauseabunda;y aquella misma mañana nos regalamos con la carne de un jabalí, que valia mucho más. Construimos pues un escondite en el bosque, y allí, en una plataforma puesta sobreestacas á cuatro pies de altura, dejamos amarrados sacos de galleta, tasajo, habichuelas y unbarril de El Usumacinta en el paso Valchilan Al dia siguiente, sétimo de viaje, muy temprano, trepamos á pié por los vericuetos de lamontaña. Fué ciertamente una ruda etapa durante la cual tuvimos que encaramarnos por lascuestas del Mirador y del pico del Águila, aunque este último apenas tiene de 420 á 450metros de altura. Poco después bajábamos al llano y acampábamos á orillas del rio Chotal, quedesemboca en el Usumacinta. En nuestra última jornada de marcha encontramos un viejomontero llamado Pepe Mora que hacia tres meses habia salido de su pueblo y vivia solo condos indios en aquellas grandes soledades. Se ha instalado junto á un recodo del Chotal, haconstruido allí una cabana y se dedica á cazar para mantener á sus dos hombres que andanpor los bosques contando y marcando los árboles de caoba. Este veterano se halla en un estado deplorable; está macilento, abatido y devorad


Size: 1987px × 1257px
Photo credit: © The Reading Room / Alamy / Afripics
License: Licensed
Model Released: No

Keywords: ., bookcentury1800, bookdecade1880, bookidamericapinto, bookyear1884