La Mujer . ANECDOTAS PKí^PORCION En la calle de Belgranonueve mil ciento noventavive Petrona Ciranotiene mil pesos de rentay es nieta de un escribano. Gedeón está en una fonda, y al amanecer oye que el camarero está llamando ) por su cuarto. Indudablemente voy á á los huéspedes, pasando de largo por su cuarto. —¡Y no entra aperder el tren! \ Si despertarme ¡—exclama indignado,será animal ese hombre!* En casa de un banquero: —Papá. Adolfo me ha hecho una declara-ción y me ha dicho que te va á pedir mi te advierto que no tiene ninguna aptitudpara el comercio. —Hija mía, el hombre que p


La Mujer . ANECDOTAS PKí^PORCION En la calle de Belgranonueve mil ciento noventavive Petrona Ciranotiene mil pesos de rentay es nieta de un escribano. Gedeón está en una fonda, y al amanecer oye que el camarero está llamando ) por su cuarto. Indudablemente voy á á los huéspedes, pasando de largo por su cuarto. —¡Y no entra aperder el tren! \ Si despertarme ¡—exclama indignado,será animal ese hombre!* En casa de un banquero: —Papá. Adolfo me ha hecho una declara-ción y me ha dicho que te va á pedir mi te advierto que no tiene ninguna aptitudpara el comercio. —Hija mía, el hombre que pide la hija á unmillonario dá pruebas de tenerla. * * ? En el despacho de un abogado. El letrado dice á uno de sus pasantes: —¿Ha preparado usted el proceso —No, señor; se me ha olvidado. —¿Se lo ha olvidado á ustedV Cuando sees tan imbébil, se liace lo que yo: se toma unaapuntación. * * En una tertulia: —Desde que estoy casada he enseñado ámi marido la cienc


Size: 1312px × 1904px
Photo credit: © The Reading Room / Alamy / Afripics
License: Licensed
Model Released: No

Keywords: ., bookcentury1800, bookdecade1890, booksubjectwomen, bookyear1899