. Fabulas. La fábula anterior iba leyendoUn caminante á pie, y halló durmiendoEn regalada paz, bajo unos pinos,A un salteador famoso de óse de allí; mas, entre dientes,A la fábula dijo:—Amiga, hombre de quien huyo acelerado,Goza un sueño feliz, y es un ó por sí la cara,Contestando la fábula:—Querido,Si el ladrón no durmiera, te robara:Mira lo que su sueño te ha valido. Excepciones padecen, más ó menos,Las reglas quietos están los criminales,No peligran los LA VISIÓN Y EL LIBRO. cierto pecador impenitente,De los que tienen conocidame
. Fabulas. La fábula anterior iba leyendoUn caminante á pie, y halló durmiendoEn regalada paz, bajo unos pinos,A un salteador famoso de óse de allí; mas, entre dientes,A la fábula dijo:—Amiga, hombre de quien huyo acelerado,Goza un sueño feliz, y es un ó por sí la cara,Contestando la fábula:—Querido,Si el ladrón no durmiera, te robara:Mira lo que su sueño te ha valido. Excepciones padecen, más ó menos,Las reglas quietos están los criminales,No peligran los LA VISIÓN Y EL LIBRO. cierto pecador impenitente,De los que tienen conocidamenteYa en la conciencia callo,Todas las noches al cantar el gallo,Una horrible visión se aparecí nada al visitado le servíaValerse de conjuros y oraciones:Tiesa que tiesa la visión impíaDos horitas con él se divertía,Sus ojazos clavándole saltones:|Huy! El Señor nos libre de noche de inviernoEn que rabiaba el hombre de furiosoCon aquel pasmarote sempiterno,Va y coge una novela,Fresquita producción de autor famoso,Perteneciente á la infernal escuelaPatrona del delito,
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