La Mujer . hay un puesto vacante? —Sí, señor. —Pues vea, propóngase á la persona cuyo nom-bre va en este papelito. Era el de un recomendado de aquel padre de lapatria con quien compartía amigabkmenie. —Y el ascenso? — se atrevió á pregiintar el gefeinmediato. —Déjese de zonceras. Aquí solo deben ascenderlos que vienen bien recomendados. El hecho es literalmente Gráfico ! Y esto es lo menos. Lo más está en la destituciónde empleados bajo cualquier pretesto para darlecabida á los bieti recomendados que á veces suelen tener causa abierta en el tribunal del cri-men. Resulta entonces que
La Mujer . hay un puesto vacante? —Sí, señor. —Pues vea, propóngase á la persona cuyo nom-bre va en este papelito. Era el de un recomendado de aquel padre de lapatria con quien compartía amigabkmenie. —Y el ascenso? — se atrevió á pregiintar el gefeinmediato. —Déjese de zonceras. Aquí solo deben ascenderlos que vienen bien recomendados. El hecho es literalmente Gráfico ! Y esto es lo menos. Lo más está en la destituciónde empleados bajo cualquier pretesto para darlecabida á los bieti recomendados que á veces suelen tener causa abierta en el tribunal del cri-men. Resulta entonces que la moral de que el doctorCañé se muestra tan quisquilloso es Luis Rodríguez ALBUM-RKVISTA «LA MUJER. ECOS DE LAS FIESTAS MAYAS CONFRATERNIDAD HISPANO - ARGENTINO Publicamos gráficamente la imponentemanifestación que el 24 de Ma3^o la plaza de la Victoria en loscostados norte y sud, en el momento deconcurrir las asociaciones españoles al. Las Sociedades Españolas cantando el Himno da Confraternidad perfectamente las autoridades de la Nación,desde el presidente de la república á susministros que aplauden entusiasmados iosbellísimos acordes de la composición pa-triótica. Frente á aquella colosal orques-ta, formada de to-das las asociacio-nes españolas,destacando la fi-guradel director. Sin embargo,hubiésemos de-seado tras adar-los á nuestrascolumnas de estenúmero en mayorformato. La premura deltieaipo y el espa-cio de que dispo-nemos, nos lo haimpedido. Lo haremos enel número si-guiente; pero enCromo, dándoleslas páginas cen-trales de nuestroAlbum-Revista. palacio presidencial, locando el Himno El acontecioiiento, indudablemente, me-Argentino y el de la Contraternidad, del rece de nuestra parte una atención pre-compositor señor Pela^^o. ferente, y se la haremos, como 3a lo deci- Toda ponderación sería poca, como todo mos, en nuestro número próximo,descripción páli-da ante la indes-criptib
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