La Mujer . en veranosiempre ganopara jugar y comer,y si acasopierdo un día. aceite sevillano quede esos tarros de la-ta que los vascosllevan todavía. El traje es casi e ]mismo que usabany aún usan los dig-nos hijos de Vizca-ya, quienes, proba-blemente, no hanquerido que se per-diera la tradiciónen eso. Como descripción,la más bella, damosá conti nuación lapreciosa canción deFlorencio Balcarce. espero en Dios y Maríaque otro día me irá bien, pues no todo sale bueno: se oye el trueno; alguna vez;y si hoy mi caballo ruedallegará un día en que pueda del alcalde y el teniente, hacer burla trente á
La Mujer . en veranosiempre ganopara jugar y comer,y si acasopierdo un día. aceite sevillano quede esos tarros de la-ta que los vascosllevan todavía. El traje es casi e ]mismo que usabany aún usan los dig-nos hijos de Vizca-ya, quienes, proba-blemente, no hanquerido que se per-diera la tradiciónen eso. Como descripción,la más bella, damosá conti nuación lapreciosa canción deFlorencio Balcarce. espero en Dios y Maríaque otro día me irá bien, pues no todo sale bueno: se oye el trueno; alguna vez;y si hoy mi caballo ruedallegará un día en que pueda del alcalde y el teniente, hacer burla trente á frentecuando esté firme de pie- V Así pasa la semana y en mañanano se me ocurre pen«;ar. Si es domingo voy á misay no me mudo camisa«íi no la puedo encoiitrar. Soy en guerra montonero, soy lechero cuando hay pa/.Sólo necesito y quierotener pronto un parejero en que pueda bien seguro si se ofrece algún apurono correr sino volar. Plori Ncio Balcarce. COSTUMBRES DE ANTAÑO (1810 á 1820.
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