La Mujer . nacido con el cabello blan-co, que es la originalidad de la raza albina. Y, hasta cierto punto, vale más que no seaalbino, porque la gente que entiende poco deortografía, pudiera haber escrito alguna vez:—Mesa slvin I—lo cual hasta hubiera podidoser considerado como un epigrama punzante. Que es aficionadillo, lo es, aún sin el dimi-nutivo; pero con eso no hace mal á nadie, niaún á sí mismo, puesto que el esceso de ale-gría no ha matado á nadie jamás. Alegría y gracia añadiremos, pues Mesa nola pierde nunca, ni en pleno sol, ni en plenatiniebla, ni siquiera entre dos luces. Con su ca


La Mujer . nacido con el cabello blan-co, que es la originalidad de la raza albina. Y, hasta cierto punto, vale más que no seaalbino, porque la gente que entiende poco deortografía, pudiera haber escrito alguna vez:—Mesa slvin I—lo cual hasta hubiera podidoser considerado como un epigrama punzante. Que es aficionadillo, lo es, aún sin el dimi-nutivo; pero con eso no hace mal á nadie, niaún á sí mismo, puesto que el esceso de ale-gría no ha matado á nadie jamás. Alegría y gracia añadiremos, pues Mesa nola pierde nunca, ni en pleno sol, ni en plenatiniebla, ni siquiera entre dos luces. Con su carácter jovial, se atrae la amistadde todo el mundo, porque además de lo jovial,se distingue en su trato, por lo ameno y porlo culto. Y cuando ausente de sus amigos, éstos re-cuerdan tal ó cual frase intencionada, siempregraciosa, de esas que brotar suelen esi)ontá-neamente, sin artificios ni rebuscamientos, delos lábios del gracioso actor, se preguntan: —¿De dónde vino ese chiste?. —Pues vino, de Mesa. Ese vino de Mesa, que i>arece hasta una fraseanunciadora del néctar de los dioses, se haquedado entre sus íntimos, como fórmula derespuesta siempre que se trate de averiguarla procedencia de ese chiste. jAh! Si Mesa hubiera nacido vino, pongopor caso, hubiera tenido las mismas simpatíasque siendo actor, porque habría satisfecho to-dos los gustos; hubiera sabido á Jerez á losingleses, á Chipre á los griegos, á Chianti álos italianos, á Oporto á los portugueses, á Champagne á todo el mundo. Esto, esto hubiera sido Mesa; por lo fino y por lo ele-gante; esto que es en los banquetes de tono,como el agua santa en la ceremonia bautismal. No hay buena comida sin champagne, y nohay pieza graciosa sin Mesa. Desinteresado como el que más, suele tirarla casa por la ventana, para obsequiar á susiamigos; y cuando no encuentra ninguno ámano se obsequia á sí mismo. Una vez le tocó en suerte un premio gordo,jugando á la lotería; pues al mes ya


Size: 2013px × 1241px
Photo credit: © The Reading Room / Alamy / Afripics
License: Licensed
Model Released: No

Keywords: ., bookcentury1800, bookdecade1890, booksubjectwomen, bookyear1899