De la imitacion de ChristoCuatro libros en un tomo, nuevamente reducidos à la fidelidad del original latino . a el de la paz y sosiego. — En unas co-sas es bien pensar , cuando estamos tristes ;V en otras , cuando alegres en el Señor. las fiestas principales debemos reno-var los buenos cgercícios , é invocar con ma-yor fervor la intercesión de los santos. —De una fiesta para otra debemos proponeriilgo, como si entonces hubiésemos de salir;de este mundo , y llegar á la eterna festivi-dad. — Por eso debemos aparejarnos concuidado en los tiempos devotos; y conversarcon mayor devoción , y gua
De la imitacion de ChristoCuatro libros en un tomo, nuevamente reducidos à la fidelidad del original latino . a el de la paz y sosiego. — En unas co-sas es bien pensar , cuando estamos tristes ;V en otras , cuando alegres en el Señor. las fiestas principales debemos reno-var los buenos cgercícios , é invocar con ma-yor fervor la intercesión de los santos. —De una fiesta para otra debemos proponeriilgo, como si entonces hubiésemos de salir;de este mundo , y llegar á la eterna festivi-dad. — Por eso debemos aparejarnos concuidado en los tiempos devotos; y conversarcon mayor devoción , y guardar toda obser-vancia con mas exactitud , como quien ha derecibir en breve de Dios el premio de sus trabajos. 7. Y si se dilatare , creamos no estar bienpreparados , y que aun somos indignos detanta gloria , como se nos descubrirá en el GAP. XX. 41 tiempo preordinado ; y cslndionios en apare-jarnos mejor para morir. — Bienaventura-do el siervo, (dice el evangelista S. Lucas)que , cuando viniere el Señor , le hallare ve-lando : en verdad os digo que le constituirásobre todos sus CAPÍTULO XX. •^^-Del amor ala soledad y silencio. 1. 15uscA tiempo competente para estar conti-go , y piensa á menudo en los beneficios deDios. — Deja las cosas curiosas. — Lee ta-les materias que te den mas compunción. »2 1,1 n. I. que ocupación. — Si In jiparla res de con-versaciones supérfluas y de andar ocioso, y(le oir novedades y rumores, liallaríís lioniposuficiente y á propósito para darte á la me-ditación de las cosas divinas. — Los ma-yores santos evitaban, cuanto podian , lacompañía de los hombres , y elegian el ser-vir á Dios en su retiro. 2. Dijo uno : cuantas veces estuve entre loshombres , volví menos hombre: lo cual espe-rimcntamos con frecuencia, cuando hablamosmucho. — Mas fácil cosa es callar siempre,que el no excederse en hablar.—Mas fá-cil es ocultarse en casa , que guardarse deltodo fuera de ella. — Por esto el que quie-
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