La Mujer . en todas ellas dieronprueba los manifestantes dela más fina cultura; ni unavoz, ni un solo eco discor-dante en ellas. Al ])ublicar los retratosdel diplomático peruano, elde su digno secretado y elacto gráiico de la manifes-tación, nos hacemos un ho-lu^r cu saludará loshuési>e-des y en desearles gratapermanencia entre nosotrosy felices i-esultadosen su mi-.^ ióii (lioli>iiiáuc;t UNA ROSA Fresca y purpurina llorde mitizados carnuuos,jnira imágoa del candordel an^ol encantadorque te cortó ea sus Ven, flor dichosa, conmigo;ven y escucha lui pasituiy mientras yo te hendi
La Mujer . en todas ellas dieronprueba los manifestantes dela más fina cultura; ni unavoz, ni un solo eco discor-dante en ellas. Al ])ublicar los retratosdel diplomático peruano, elde su digno secretado y elacto gráiico de la manifes-tación, nos hacemos un ho-lu^r cu saludará loshuési>e-des y en desearles gratapermanencia entre nosotrosy felices i-esultadosen su mi-.^ ióii (lioli>iiiáuc;t UNA ROSA Fresca y purpurina llorde mitizados carnuuos,jnira imágoa del candordel an^ol encantadorque te cortó ea sus Ven, flor dichosa, conmigo;ven y escucha lui pasituiy mientras yo te hendijíotenga en tu ciüiz abrigola fé de mi corazón. Ti\ que ta! vez en el senore, osaste de esa liermosa,¿(limo si late serenoy a la pasión en que penocorresponde cariñosa? Contéstame i)or tu vida,que es tormento la impacienciay sospeclio. llor querida,que stMa cruel sentenciaEn tu silencio escondida. B. ALBUM-REVISTA LA MUJER EL JEFE DEL BATALLON DE QUINTEROS DON ANTONIO LIKMANO I^, El Comandante Antonio Luciano Ballester, nació enla ciudad de Buenos Aires, el 26 de Octubre de 1775. Cuando tuvo lugar la invasión inglesa, en 1806, resol-vió, unido á varios otros jóvenes, organizar la policía depesquisas, que los tuviese al corriente de todos los movi-mientos y proyectos del invasor, la que se hizo másactiva á medida que aumentaban los cuerpos reconquis-tadores. Cuando desembarcó el general Liniers de JIontevideose encontró, por medio de esa policía al corriente decuanto pasaba en la ciudad. En vísperas de la reconquisfa, Ballester, al frente deocho ciudadanos patriotas y arrojados como él, concibióel proyecto de apoderarse de la llamada Pólvora deCuell depósito situado al oeste de la ciudad, custodiadopor una guardia inglesa de Berresford. Llevó á cabo su empresa con tal sagacidad y rapidezde acción, que sorprendió al centinela asiéndolo de ambosbrazos á la vez. A su voz de avancen, sus compañerosse apoderaron de los fusiles de la
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