La Mujer . o la fortuna de popularizarse bastante, enfuerza de ser declamada por los niños en las fiestas esco-lares; y esta circunstancia es indicio elocuente, á mi en- tender, de que en ella están interpretados con fidelidad,sentimientos que abrigan para España todos los corazonesen esta parte de América, que ella conquistó, pobló y ci-vilizó. Por eso, y no por vanidad pueril, le envío la composi-ción aludida,—en la que Vd. verá que, si los españoles nosquieren á los argentinos, nosotros correspondemos á eseafecto, profesando á la Patria de nuestros antepasados elculto de la gratitud por lo


La Mujer . o la fortuna de popularizarse bastante, enfuerza de ser declamada por los niños en las fiestas esco-lares; y esta circunstancia es indicio elocuente, á mi en- tender, de que en ella están interpretados con fidelidad,sentimientos que abrigan para España todos los corazonesen esta parte de América, que ella conquistó, pobló y ci-vilizó. Por eso, y no por vanidad pueril, le envío la composi-ción aludida,—en la que Vd. verá que, si los españoles nosquieren á los argentinos, nosotros correspondemos á eseafecto, profesando á la Patria de nuestros antepasados elculto de la gratitud por lo que le debemos, el del cariñoporque á ello nos impulsa la sangre, y el de la admiraciónpor las cualidades de raza gue lia revelado en las vicisi-tudes, favorables y adversas, de su accidentada y esplen-dorosa existencia á través de los siglos. Saludo á Vd. con mi mayor consideración y aprecio, yme suscribo de Vd. aífmo. S. S. Francisco Ferreira, S/c. Alsina, 477. H3 S F -A. nsr ^ a-. la mm Si en un tiempo no lejanoCayó abatido el leónIbéiico, ante el pendónDel vasallo temas, nó, pueblo Hi-pa:io,t¿ue los libres vencedoresAbriguen bajos rencoresHácia aquellos que en la Hist iria,Para su orgullo y su án siemjtre sus mayores. Que si .América luchóPor conquistar su ás en cambio su pechoLa ingratitud albergó: Y ella sabe que heredóAquella misma energía Con que á España dijo un día: Basta ya de tutelage 1 Los hombres de tu linage No sufren la tiranía ! Y aquella noble altiveza, Y aquel denuedo sereno, Y aquella ambición sin frenoDe libertad y grandeza, Y aquella ruda entereza Del alma en la aciaga suerte Si fué la América fuertePara romper sus ú diste sangre á sus venas,Oh, España, para vencerte ! Aun los ecos retumbantesResuenan de aquella lucha,El aspirar áun se escuchaDe los soldados jadeantes;Fué una lid de giiíaiiles,(¿ue sin tregua y sin desmayoLanzaban ardiente rayoSobre sus padres v


Size: 1324px × 1887px
Photo credit: © The Reading Room / Alamy / Afripics
License: Licensed
Model Released: No

Keywords: ., bookcentury1800, bookdecade1890, booksubjectwomen, bookyear1899