La Mujer . otros dioses que se fueron, jamás lo hé vistoclaudicar de su crédo político-social; siem-pre el mismo sin discrepar en su ,nodo deser ni en su modo de pensar. Lejos de su patria aceptó la represen-tación de esta y la renunció cuando tuvo ALBUM- REVISTA «LA MUJER. el convencimiento de que su gobierno noera la verdadera expresión de aquella. Vuelto á la tierra que le diera^ el sertras largo plazo de ausencia, dedicóse ádarle mayor impulso á su empresa perio-dística sin otras Oh, si lashubiera tenido!... Si hubiera querido do-blegarse á las situaciones creadas por iapolit


La Mujer . otros dioses que se fueron, jamás lo hé vistoclaudicar de su crédo político-social; siem-pre el mismo sin discrepar en su ,nodo deser ni en su modo de pensar. Lejos de su patria aceptó la represen-tación de esta y la renunció cuando tuvo ALBUM- REVISTA «LA MUJER. el convencimiento de que su gobierno noera la verdadera expresión de aquella. Vuelto á la tierra que le diera^ el sertras largo plazo de ausencia, dedicóse ádarle mayor impulso á su empresa perio-dística sin otras Oh, si lashubiera tenido!... Si hubiera querido do-blegarse á las situaciones creadas por iapolitica de nuestros días, es seguro queel doctor Paz ocuparía hoy uno de los más altos puestos en cualquiera de lasramas de los poderes públicos. No lo ha deseado, no lo ha querido yvuelve á ausentarse como un modestoburgués que marcha al extranjero enbusca de períeccionamientos para su con-sagración. Aunque algo tardecillo: ¡Fare well! Leafar. DESPUES DE LA La verdad es qu


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