Boletín de la Sociedad Aragonesa de Ciencias Naturales . mente era una especie nueva ó poco conocida. A los espe-cialistas corresponde su determinación y clasificación en elorden sistemático, pero á todos los naturalistas, especial- (2) DE CIENCIAS NATURALES 187 mente los entomólogos, el capturarlas, prepararlas bien ydárselas á conocer. Así, pues, creo de utilidad suma exponer en pocas pala-bras lo que sólo la experiencia de muchos años ha enseñadoá un habilísimo preparador, al cual visité durante mi reciénestancia en París en compañía del eminente odonatólogo se-ñor René Martín, y que tuvo
Boletín de la Sociedad Aragonesa de Ciencias Naturales . mente era una especie nueva ó poco conocida. A los espe-cialistas corresponde su determinación y clasificación en elorden sistemático, pero á todos los naturalistas, especial- (2) DE CIENCIAS NATURALES 187 mente los entomólogos, el capturarlas, prepararlas bien ydárselas á conocer. Así, pues, creo de utilidad suma exponer en pocas pala-bras lo que sólo la experiencia de muchos años ha enseñadoá un habilísimo preparador, al cual visité durante mi reciénestancia en París en compañía del eminente odonatólogo se-ñor René Martín, y que tuvo la bondad de participármelo ála par que trabajaba «pro Domo sua», y con el indudablepropósito de que se divulgara; el abate Joannis. Lo que dicho señor recomienda, si es que yo presté todala atención á sus autorizadas palabras y sé. traducirlo fiel-mente sacándolo de los apuntes que tomé, es lo siguiente: El mejor medio de capturar los microlepidópteros es lamanga fina de seda, y en su defecto la usual. Una vez el mi-. Fig. Fig. ero en la manga, abstenerse de tocarle con los dedos, pin-zas, etc. Todo buen microlepidopterólogo debe llevar en elbolsillo provisión de las usuales cajitas cilindricas de cartónó madera, con fondo de cristal de unos 3 centímetros cúbi-cos de cabida por 2V2 centímetros de diámetro. Tómese en-tonces una de estas cajitas, quítese la tapa é introdúzcasecuidadosamente en la manga, hasta llegar donde el microreposa y aplíquesele la cajita encima, teniendo cuidado deno interesarle parte alguna, como patas, antenas, etc. Enton-ces el micro, sorprendido por la obscuridad y reducido es- 188 SOCIEDAD ARAGONESA (3) pació, sube por el interior hasta llegar al cristal buscandouna salida. Este momento es el que se debe aprovechar paralevantar cuidadosamente la cajita con el micro, siempre enla misma postura y tapar la cajita enseguida y guardarla enel bolsillo. Una vez en casa, ir en busca del frasco con cia
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