Paginas escogidas . a, de su ruina, tormentas eléctricas pa-recían ceñir su cabeza, corno la cumbre del Duida, cuyasangrienta y encapotada cima alcanzaban apenas a divi-sar ... Un oficial llamó aparte al coronel Briceño y le dijollorando : Todo está perdido, amigo mío: lo que era to-da nuestra confianza, hélo aquí loco; está EnJa situación en que le vemos, sin más vestido que una 197 JUAN VICENTE GONZALEZ bata, soñando en el Perú. . ! Confortóle Briceño, ase-gurándole que el Libertador se chanceaba para hacer ol-vidar el mal rato que él y todos habían pasado A los


Paginas escogidas . a, de su ruina, tormentas eléctricas pa-recían ceñir su cabeza, corno la cumbre del Duida, cuyasangrienta y encapotada cima alcanzaban apenas a divi-sar ... Un oficial llamó aparte al coronel Briceño y le dijollorando : Todo está perdido, amigo mío: lo que era to-da nuestra confianza, hélo aquí loco; está EnJa situación en que le vemos, sin más vestido que una 197 JUAN VICENTE GONZALEZ bata, soñando en el Perú. . ! Confortóle Briceño, ase-gurándole que el Libertador se chanceaba para hacer ol-vidar el mal rato que él y todos habían pasado A los dos meses Bolívar había tomado a An-gostura ; dos años después la Nueva Granada le aclama-ba vencedor en Bogotá; cuatro años más tarde destru-ye en Carabobo el ejército de Morillo; a los cinco dalibertad a Quito y al cabo de los siete años sus victorio-sas banderas ondeaban sobre las altas torres del Cuzco. (De la Biblioteca de Escritores Venezolano, por DonJosé María de Rojas, 1875).. 198 PAGINAS ESCOGIDAS LA RAZA DE RIBAS Era una raza fuerte y amarga, activa, indómita,fruto de los antiguos Raibs (Ribas), en quien se cruza-ban bretones y normandos, recalentada al sol de las An-dalucías y al de la africana Tenerife, templada al cli-ma equinoccial de Venezuela. ¿Descienden los Ribas,como se cuenta, de los bretones que acompañaron a Gui-llermo a la conquista de Inglaterra ? Por largo tiempo nodegeneraron ciertamente de los primitivos habitantes delas rocas rojas, de la bahía de los asesinatos, de la isla deSein, poblada de hadas y demonios, donde piedras es-parcidas son una boda petrificada, y una piedra aislada,un pastor tragado por la luna. Los Ribas se esparcieron por España; hay Ribasen Centro América; y el viajero Clarke habla de un al-mirante Ribas que, bajo el mando de Catalina II, liber-tó a Odesa de los turcos y se propuso hermosearla y do-tarla de un magnífico puerto. En la primera mitad del siglo XVIII los Ribas, ve-nidos de las i


Size: 1629px × 1533px
Photo credit: © The Reading Room / Alamy / Afripics
License: Licensed
Model Released: No

Keywords: ., bookcentury1900, bookdecade1920, bookidpaginasescog, bookyear1921