La Mujer . del estío, de aquellos díasde un sol deslumbrador, en que lanaturaleza se presenta encantado-ra, con todo su esplendor tal o alla creó Dios!... ¡Oh, mi virgencita,hoy viene de gala con todas susjoyas, está radiante de hermosura,me llama, me hace señas para queme Sí, ya voy, mi Dejó caer la cabeza en la al-mohada y fija su mirada en algoque la atraía, dibujóse en aquelrostro santo una sonrisa, ¡la últimasonrisa!... — ¡Muerta!.. .—dijeron, como he-ridos de una corriente eléctrica, losque á su lado estaban arrodillán-dose al rededor del lecho de Ange-les, q
La Mujer . del estío, de aquellos díasde un sol deslumbrador, en que lanaturaleza se presenta encantado-ra, con todo su esplendor tal o alla creó Dios!... ¡Oh, mi virgencita,hoy viene de gala con todas susjoyas, está radiante de hermosura,me llama, me hace señas para queme Sí, ya voy, mi Dejó caer la cabeza en la al-mohada y fija su mirada en algoque la atraía, dibujóse en aquelrostro santo una sonrisa, ¡la últimasonrisa!... — ¡Muerta!.. .—dijeron, como he-ridos de una corriente eléctrica, losque á su lado estaban arrodillán-dose al rededor del lecho de Ange-les, que en vez de muerta parecíaque dormía, como en otras ocasio-nes, un sueño tranquilo, lleno de ri-sueñas esperanzas. El sol, que por un instante sehabía presentado en ese tristísimo-día, hacía llegar á «la casa de lamontaña», envuelta en su silencio-de muerte, sus últimos Carlos Axgel Galli. ALBUiM - REVISTA < LA MUJER» RECUERDOS DE LA INDEPENDENCIA SUD-AMERICANA. Álvarez Herrera y Brown EL AMANECER Va apareciendo la auroratras la niebla matutinay el bosque, prado y colinacon su claridad colora;canta la alondra canoralanzando trinos de amores,abren su cáliz las floresrompiendo su tierno broche,desaparece la nochey todo es luz y colores. Las aleg-res avecillastienden su lijero vuelo,y van buscando en el suelosus deseadas semillas;las violetas sencillasperfuman valles y lomas,todo es fragancia y aromasen las mañanas serenas,y las blancas azucenasparecen blancas palomas. Lucen con más hermosuralas flores cuando amanece,todo más bello parecey la atmósfera es más pura;es cuando tienen frescuralas pintadas campanillas,es cuando de sus celdillassalen los grupos de abejas,y pastores con ovejasde sus humildes chocillas. Todo, en fin, es alegríaal renacer la mañanay con la brisa tempranaamanece el nuevo día;todo es vida y lozaníaciando sale el sol nacientey brilla por el Orienteesa lumbre misteriosaque hace á la aurora grandiosacon
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