. Isabel la Católica; ó, El corazón de una reina, novela histórica; ilustraciones de L. Labarta. CAPÍTULO LX Amores reales. OLvió el emisario enviado á D. Enrique,sin respuesta alguna para su hermana. El rey llevó su indignación hasta elpunto de no dignarse contestar siquiera ála respetuosa carta que le escribió doña princesa al saberlo, dijo: —Puesto que él mismo me obliga á la desobediencia,sea suya y no mía la responsabilidad de lo que ocurra. Y llamó al arzobispo de Toledo, que ya se habla tras-ladado á Valladolid en previsión de los sucesos que ibaná desarrollarse, y al almirant
. Isabel la Católica; ó, El corazón de una reina, novela histórica; ilustraciones de L. Labarta. CAPÍTULO LX Amores reales. OLvió el emisario enviado á D. Enrique,sin respuesta alguna para su hermana. El rey llevó su indignación hasta elpunto de no dignarse contestar siquiera ála respetuosa carta que le escribió doña princesa al saberlo, dijo: —Puesto que él mismo me obliga á la desobediencia,sea suya y no mía la responsabilidad de lo que ocurra. Y llamó al arzobispo de Toledo, que ya se habla tras-ladado á Valladolid en previsión de los sucesos que ibaná desarrollarse, y al almirante D. Fadrique, conviniendocon ellos en celebrar una entrevista con D. Fernando yacelerar todo lo posible la boda. Ya los dos indicados personajes y otros de los más no-bles entre los partidarios de D. Isabel, habíanse traslada-do en días anteriores á Dueñas, para ofrecer sus respetosal príncipe. Preparóse todo para la indicada entrevista y ésta tuvolugar la noche del 14 de Octubre, esto es, cinco días des- 53 418 A. CONTRERAS pues de la llegada de D. Fernando, el cual ya comenzabaá cansarse c
Size: 1396px × 1790px
Photo credit: © Reading Room 2020 / Alamy / Afripics
License: Licensed
Model Released: No
Keywords: ., bookcentury1900, bookdecade1900, bookidisabellacatl, bookyear1900