La Mujer . administrado, en multitud lieenfermos que padecían divers:is formas de dispepsia, *ll)iGKSTivo Mojarrieta. me lie felicitado siempre de elloporque los resultados obtenidos han superado el juicioque yo habí a formado de diclio medicamento, y para quepueda hacerlo constar donde convenga y en beneficio r. Gregorio Garda. La señora .f. G. de Castro, rentista. Rivadavia 1439.—Buenos Aires, 1° de Septiembre de 19t»0. -Habiendo pade-cido por más de dos años de s:rave enfermedad al estómagoy probado un sin número de medicamentos, que cuandono fueron nocivos resultaroti sin efecto, recurrí a


La Mujer . administrado, en multitud lieenfermos que padecían divers:is formas de dispepsia, *ll)iGKSTivo Mojarrieta. me lie felicitado siempre de elloporque los resultados obtenidos han superado el juicioque yo habí a formado de diclio medicamento, y para quepueda hacerlo constar donde convenga y en beneficio r. Gregorio Garda. La señora .f. G. de Castro, rentista. Rivadavia 1439.—Buenos Aires, 1° de Septiembre de 19t»0. -Habiendo pade-cido por más de dos años de s:rave enfermedad al estómagoy probado un sin número de medicamentos, que cuandono fueron nocivos resultaroti sin efecto, recurrí al Digks-Tivi» M(í.jAURiETA que CU poco tiempo me curó por com-pleto. Por lo que entrego el presente, autorizando á na-cer de esta el uso que crea conveniente.—./. G. de Oattro. Avo II BUENOS AJEES, 5 de Octubre de 1900 XíM. Mi LA MUJER ALBUM DE LAS FAMILIASDIRECTOR Y PROPIETARIO: El^TIAROO SOJO. La mente del Presidenteasaltan ñeros temorespues teme que la arrastre infaliblementecon tan flotadores. L. Aguirre. Algunos lo dan ya por naufragado, y tienenrazón, toda vez que el fracaso no es otra cosaque un naufragio disimulado, del que se sacaá flote, únicamente, el triste alambre de la vida. Pero ¿quien le mete á calavera, y á correrriesgos semejantes, máxime, cuando sus adjun-tos no sirven para sostenerlo á ñote? ¡ La vida privada! i Ah! ] Que dulce regalo quees, sabiéndola aprovechar el que ha servidopara algo en el mundo! No el que ha servido<ie algo. Pero el exhibicionismo es un flaco que todostenemos envuelto en la corteza del individuo,y que á semejanza de la solitaria, nos come ynos carcome. La solitaria la carne; el exhibi-cionismo el espíritu. Cuando se tiene opción á una vida rega-lada (privadamente) y se entrega uno, sin amorá nada, en brazos de la pública, todo le resultamalogrado, y fracasado. Ya en el yunque no hay más


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