. Sistema, ó curso completo de cirurgía . descuido, ó casualmente, sedexa una sola , y esta sigue comprimiendo el celebro, es poca óninguna la ventaja que se saca del resto de la operación, el pa-ciente continua casi en el mismo riesgo , y al Cirujano le serviráde mucho sentbniento ver después de la muerte que si hubierapuesto un poco mas de cuidado se pudiera haber salvado la vidade un hombre apreciable. Al mismo tiempo que se procede con este cuidado para ele-var las porciones de hueso hundidas se ha de poner particularatención á dar salida á la sangre ó suero que haya en la super-ficie de l
. Sistema, ó curso completo de cirurgía . descuido, ó casualmente, sedexa una sola , y esta sigue comprimiendo el celebro, es poca óninguna la ventaja que se saca del resto de la operación, el pa-ciente continua casi en el mismo riesgo , y al Cirujano le serviráde mucho sentbniento ver después de la muerte que si hubierapuesto un poco mas de cuidado se pudiera haber salvado la vidade un hombre apreciable. Al mismo tiempo que se procede con este cuidado para ele-var las porciones de hueso hundidas se ha de poner particularatención á dar salida á la sangre ó suero que haya en la super-ficie de la dura madre. Se deben quitar igualmente todas lasporciones de hueso ú de algún otro cuerpo extraño que se hayapenetrado hasta el celebro; y concluido esto perfectamente, se cu-rará la herida, y se dexará descansar al enfermo. Acerca del modo de curar las heridas después de esta opera-clon varían infinito los antiguos y los modernos. Para prec¿iverla gangrena de la dura madre y del celebro se han recomendado :EfíXxviii. m Secc. III. ^^^ celebro, ^c. 109 diferentes remedios antisépticos, como también Introducir lechi-nos cubiertos de estos remedios, así en el agujero formado pa-ra la sierra, como entre el cráneo y la dura madre, llevándoloslo mas adelante que se pueda sin ofender las partes ; pero si sereflexiona sobre los efectos de esta práctica al punto se verá quees muy impropia. El único objeto de la trepanación es quitar lacompresión del celebro ; luego es preciso que el aposito mencio-nado , sobre todo los lechinos que se introducen en las diferen-tes perforaciones, produzcan lo contrario , no solo con la com-presión que directamente hacen al introducirlos, sino tambiénimpidiendo la salida libre del pus que resulta después de la ope-ración, de lo que muchas veces depende en gran parte la vidadel enfermo; y así en lugar de esto se han de curar las heridascon los remedios mas suaves, y aplicarlos lo mas floxamente quese pueda. La hila seca
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